En los últimos tiempos la armonía como elemento estructural de la composición musical, ha jugado un papel importantísimo en la concepción de composiciones y arreglos para la música Coral y Vocal cuando hablo de armonía vocal me refiero a esa muy particular que deriva del Jazz y del impresionismo francés y que ha dado por llamarse “armonía jazzística”.. ¿Existe acaso una armonía jazzística? Tema muy importante para ser tratado en otra ocasión y contexto; de momento esa armonía «jazzística» ha absorbido casi exclusivamente la atención de la mayoría de los compositores y arreglistas, generando una moda que ha excluido otros elementos estructurales importantes de la Composición Musical: me refiero concretamente al ritmo con todas sus conquistas métricas del siglo XX (polimetría horizontal y vertical) y a la Polifonía melódica, que genera armonías en base al contrapunto y al entrecruzamiento de las voces que deben cantar cada una con su importancia relativa. Esto sin contar que hay una armonía moderna en función del ritmo, del timbre o el color, desarrollada por compositores importantes del siglo XX entre los que cabe destacar: Bartok – Stravinski – Prokofiev- Lutoslawski – Ligeti – armonía estructurada en acordes de 4tas y 5tas, en pequeños racimos de 2das mayores y menores, en disonancias extremas, en función de una polimetría vertical y horizontal; lo mismo podríamos incluir el concepto de Polifonía moderna, basada en melodías de timbres, efectos propios de los instrumentos: glissandos, frotamientos de cuerdas, frulatos, golpes y ruidos, melodías quebradas con intervalos extremos y hacemos mención al Serialismo de Messiaen y Boulez, elemento importante que podría tomarse en cuenta. Por supuesto la voz tiene limitaciones si se compara con las posibilidades técnicas de los otros instrumentos, pero por otro lado posee recursos expresivos propios y únicos que poco han sido utilizados de una manera que no sea efectista.(recuérdese los excesos de la vanguardia extrema y sus epígonos).

Pero la moda o la tendencia exclusiva actual en la Composición Vocal y Coral es regodearse en armonías muy sonoras que requieren de un tiempo largo para resonar y resolver, implicando una limitación rítmica en los compositores, limitación que los restringe al uso de compases simples en aires moderados o lentos, la mas de las veces, ya que en tiempos rápidos estas armonías no serían funcionales, puesto que no tendrían tiempo para resolver y resonar y observamos entonces que las armonizaciones son pesadas, generalmente en bloque ( las voces no cantan) y siempre bajo el influjo de la función tonal…la melodía en consecuencia no tiene vida propia.. mientras que la modalidad es abordada a veces pero no en su concepto armónico modal con sus funciones características, es decir que se emplea fugazmente como elemento melódico y siempre supeditada a la función tonal.

El panorama es lamentable porque se pierde, por exclusión, una riqueza de material sonoro y se da vueltas en un círculo vicioso en donde escasea el contraste y abundan los lugares comunes, que han trascendido todas las fronteras, encontrándose compositores de diferentes latitudes que caen en estos lugares comunes como si fueran recetas aplicadas en diversos momentos “estratégicos” de la composición. En el caso de los arreglos, sobre todo de música popular, encontramos mas creatividad que deriva de una relación directa con la inventiva melódica y rítmica del compositor popular… pero si añadimos, que cuando se utilizan en las composiciones, elementos del “modernismo»como: clusters, melodías no convencionales o fragmentadas, armonías disonantes de vanguardia, siempre o casi siempre se utilizan como elementos “exóticos” dentro de un contexto diatónico que conforman un híbrido, la mayoría de la veces, sin que pueda definirse, realmente, donde está el “modernismo” de esas composiciones. Entendamos bien, música contemporánea no es lo mismo que música moderna, de hecho hay muchos compositores modernos que no son contemporáneos, ya desaparecidos, pero que se adelantaron significativamente a su tiempo y otros que si lo son y por otra parte y esto es importante, hay muchos compositores contemporáneos que no son modernos, porque sobre todo en la música coral y vocal permanecen atados al concepto armónico del siglo 19 en lo que refiere al uso exclusivo de la tonalidad.

No faltara quien diga “es que la música tonal es más bella” y sin negarlo les respondo: es que acaso la música como tal y como obra de arte debe ser exclusivamente bella y ¿qué es bello? ¿Es acaso menos bella una obra de arte moderna que una del pasado…? ¿Y el concepto de belleza no varía con las épocas..? ¿y las épocas no determinan un avance significativo en el desarrollo técnico y expresivo de los instrumentos musicales? ¿y acaso la voz humana ha quedado excluida de ese desarrollo y evolución?.

Siendo el Coro un instrumento no temperado, las posibilidades de utilizar la mayor parte de los elementos y recursos estructurales modernos son muy variadas; por supuesto, la voz tiene limitaciones (ya lo destacamos en párrafo anterior) y los cantantes de Coro normalmente son “amateurs” lo cual ha influido para que los compositores restrinjan el uso de estos elementos modernos.. pero tomando en cuenta el escenario amateur de los cantantes, con mucho talento por supuesto y con Directores bien preparados musical y técnicamente, podríamos, sugerir a los Compositores y Directores interesados y ambiciosos, una lista de elementos técnicos y estructurales modernos asequibles y posibles que darían un vuelco al espectro sonoro vocal académico actual y una riqueza y contraste que mantendría en vilo a la audiencia.. muy diferente al aburrimiento y “pesadez” que caracteriza la mayoría de los conciertos de música Coral “académica”, “seria” ó “ culta que de una manera limitada (por el uso exclusivamente de la armonía tonal «Jazzistica») se nos ha vendido como música vocal moderna.

Elementos como: a) el ritmo ( polimetría vertical y horizontal – b) armonía en función del ritmo, del color y del timbre ( por 4tas y 5tas – pequeños racimos sonoros (clusters) choques de 2das en función del color y del timbre, la modalidad – la Polifonía de melodías que se entretejen originando la armonía sin función tonal la polimetría vertical como ilusión de retención del movimiento o tempo, son elementos y recursos que no constituyen la vanguardia sonora del modernismo musical, pero que son tanto o más modernos en la medida en que no se hacen obvios.

Para concluir, podemos citar como excepción, el desarrollo que en composiciones y arreglos vocales ha logrado la voz humana en la música popular vocal, que ha incorporado a su espectro sonoro no solo la riqueza rítmica de nuestra música popular y folklórica sino técnicas para la imitación de instrumentos: percusión – batería – guitarra eléctrica- tres – piano – metales – bajo eléctrico – contrabajo acústico – que se pueden incorporar como parte estructural de los arreglos, imbricados con las líneas melódicas de cada voz o como instrumentación añadida, conservando el arreglo vocal en su pureza coral … es de notar que en los arreglos de esta música popular en tiempos rápidos, la “armonía Jazzistica” que cuestionamos al comienzo de esta reflexión, se dinamiza en función del ritmo, se hace percutiva y se aligera en cuanto a la velocidad de resonancia y resolución de acordes, ampliando su espectro sonoro con el contrapunto melódico y onomatopéyico y la polifonía de efectos de imitación instrumental.

Como corolario a estas reflexiones y en consecuencia directa, destacamos que en nuestro medio los compositores vivos con obra en proceso, se ven relegados por algunos compositores extranjeros a cuyas obras se les da una importancia irreflexiva en función de la boga que gozan y solo algunos directores pueden trabajar sus propias obras a título personal con sus agrupaciones, descuidando también por falta de tiempo, por subestimacion o falta de conciencia del problema, la producción de sus colegas nacionales, si a esto añadimos la falta de preparación e ignorancia de estos elementos básicos del modernismo ya especificados que afecta y limita a la mayoría de nuestros directores de coro, veremos que la motivación para la creación «académica» que sienten nuestros compositores, es prácticamente nula cuando no están dispuestos a ceder a las exigencias de una moda que mantiene al «gusto» del publico sesgado y ausente, por la misma ignorancia, de un mundo sonoro coral mas pleno.

Al replantear la consideración y el estudio de los elementos ya expuestos, no implico una reacción en contra de la música popular, que al estar tan vinculada a la tonalidad se ha beneficiado, como ya destacamos, directamente en su evolución, con todas estas conquistas armónicas tonales del siglo XX y mucho menos abogo por una vuelta a la vanguardia efectista, cuyos excesos originaron como reacción el Post Modernismo con todas sus vueltas a… incluyendo este movimiento que cuestionamos y cuyos aportes a través de sus mas importantes representantes reconocemos y celebramos, pero que ya da muestras de agotamiento y decadencia por las razones que hemos expuesto… es, al contrario, una exhortación a nuestros Directores y coralistas a ampliar su nivel de conocimientos, corrigiendo estas deficiencias en pro de un universo sonoro coral «académico» mas amplio, diverso, contrastante, menos cómodo y mas comprometido con la interpretación y difusión de la música, tan rica en posibilidades y logros, de nuestro tiempo.

Francisco Zapata Bello.

Próximo tema de Reflexión: La Música Sacra contemporánea ¿ficción o realidad?